La mayoría de los adolescentes han tenido alguna experiencia con bebidas alcohólicas y con otras drogas. La mayoría experimenta un poco y deja de usarlas, o las usa ocasionalmente sin tener problemas significativos. Algunos seguirán usandolas regularmente con varios niveles de problemas físicos, emocionales y sociales.
El saber rechazar es parte de la solución, pero el "decir no" no es suficiente.
Aunque el uso de algunas drogas se ha mantenido constante recientemente, el uso de otras está en aumento. En particular, el uso de las bebidas alcohólicas, los cigarrillos y continúan siendo áreas de gran preocupación.
Los adolescentes que comienzan a fumar (marihuana) o a beber desde temprana edad corren un grave riesgo.
- Físicas: fatiga constante, ojos enrojecidos y sin brillo.
- Emocionales: cambios en la personalidad, cambios rápidos de humor, comportamiento irresponsable.
- Familia: desobedecer las reglas o el dejar de comunicarse con la familia.
- Escuela: calificaciones bajas, problemas de disciplina.
- Problemas Sociales: amigos nuevos a quienes no les interesan las actividades, problemas con la ley.
